‘El caso nitrógeno’, es peor de lo que pensábamos, según un pronostico publicado hoy por el banco neerlandés ABN-Amro:
El crecimiento en varios sectores empresariales se está viendo muy afectado por la incertidumbre que rodea ‘el caso nitrógeno’. La pregunta es si ese futuro incierto podría prevenirse. Se necesita un cambio de mentalidad entre el gobierno, las empresas y los consumidores para evitar nuevas sorpresas, aconsejan los economistas de ABN-Amro.
‘El Caso Nitrógeno’
En resumen, el gobierno neerlandés se vio obligado a limitar el efecto del nitrógeno en el medio ambiente, causando protestas masivas por parte de las industrias agrícolas y de la construcción.
Entre otras cosas, el gobierno decidió limitar la velocidad en las autopistas y parece decidido a limitar tanto la construcción como la agricultura para preservar el «equilibrio de la naturaleza».La falta de casas en el mercado no es el único problema y el tema sigue siendo un debate candente en la política neerlandesa.
Muchos sectores se ven muy afectados por la incertidumbre relacionada al ‘caso nitrógeno’
La incertidumbre sobre las políticas de nitrógeno frena el crecimiento del volumen en muchos sectores. El sector agrícola, la construcción, la industria, el transporte y la logística serán los más inhibidos en 2020. En la agricultura, las medidas de nitrógeno afectan principalmente las explotaciones lecheras. De esta manera, la cantidad de explotaciones lecheras puede reducirse.
El sector de la construcción cambiará en 2020 del 4 por ciento de crecimiento en 2019 a una disminución del 2 por ciento. Tanto la construcción residencial como no residencial, y la ingeniería de suelos, carreteras e hidráulica se ven muy afectadas por la falta de una solución definitiva al caso nitrógeno. La industria y el sector del transporte también muestran menos crecimiento, en parte porque una disminución en la construcción dará lugar a una caída de la demanda de materiales de construcción, herramientas y equipos de construcción.
Otros sectores si crecen
Los sectores que no se ven afectados por las políticas de nitrógeno, por otro lado, funcionan bien. Por ejemplo, a pesar de la continua escasez de personal, el sector llamado ‘TMT’ (Tecnología, medios y telecomunicaciones) está mostrando un crecimiento superior al promedio que se espera en 2020. Este crecimiento se debe principalmente al sector tecnológico, que logró un crecimiento de ingresos de no menos del 7 por ciento en 2019.
El sector turístico también está creciendo. Esto se debe en parte a un aumento en el poder adquisitivo y un aumento en el número de turistas extranjeros, que en conjunto representan alrededor del 40 por ciento de todo el gasto turístico en los Países Bajos.
Los servicios empresariales también están funcionando bien, con un crecimiento estimado del 2,5 por ciento en 2020, impulsado principalmente por los servicios de recursos humanos y las agencias organizativas.
También se espera que el sector inmobiliario experimente un crecimiento de valor en 2020 y 2021. Esto se debe principalmente a la falta construcción, que tiene un efecto de aumento de precios en los edificios existentes.
El gobierno, las empresas y los ciudadanos deberían cambiar su mentalidad
Para evitar la incertidumbre en el futuro, es necesario que el gobierno, las empresas y los consumidores intervengan antes, especialmente con respecto a los objetivos climáticos. Es difícil estimar cuándo intervenir. La esencia de la crisis ambiental es que el dolor solo se siente cuando ya es demasiado tarde. Eso requiere una perspectiva visionaria. Los que comienzan antes pueden ser innovadores y, cuando sea necesario, trabajar en un cambio de mentalidad a favor del clima. El gobierno puede ofrecer ayuda con, por ejemplo, subsidios, legislación o mediante compras sostenibles. Esto estimula a los empresarios a hacer negocios de manera sostenible.
Esta noticia fue traducida de un comunicado de prensa del banco neerlandés ABN-Amro; informe original aquí.
