El Senado neerlandés aprobó ayer el proyecto de ley para el experimento de ‘cadena cerrada’. Esto significa que el nuevo experimento de coffeeshops puede comenzar en 10 ciudades seleccionadas, ¿cómo funciona?
Después de la legalización de la venta y producción de cánnabis en Uruguay, Canadá y Estados Unidos, entre otros, llegó el momento de revisar la política de ‘los coffeeshops’ en los Países Bajos. La política actual llamada ‘Gedoogbeleid’ (política de tolerancia) no es exactamente ideal; la venta de cánnabis es legal pero la producción no lo es, entonces los coffeeshops están en una posición legalmente extraña. La producción de todos estos ‘coffeeshops’ legales está en manos de personas que tienen que desafiar la ley, y por eso son por definición, delincuentes.
En el nuevo experimento, los coffeeshops de las 10 ciudades seleccionadas tendrán acceso a un mercado de cánnabis cultivado de manera legal. Estas ciudades son Groningen, Almere, Arnhem, Nijmegen, Zaanstad, Hellevoetsluis, Breda, Tilburg, Maastricht y Heerlen. Los coffeeshops en el resto del país siguen funcionando de la misma manera. Para el consumidor, poco debería cambiar, a pesar de que no es probable que el hachís extranjero todavía esté disponible en el experimento porque viene de contrabando desde Marruecos.
El experimento ‘cadena cerrada’
En el acuerdo de coalición de 2017, se acordó que se realizará un experimento con el cultivo y la venta de cánnabis para uso recreativo. Esto debe tener lugar en una cadena cerrada de coffeeshops, libre de delincuencia. El propósito del experimento es ver si es posible formar una cadena cerrada para el coffeeshop. Además, el gobierno neerlandés quiere que se investiguen los efectos del experimento sobre delincuencia, seguridad, molestias y salud pública.
La política actual de coffeeshops se aplica en todos los otros municipios de los Países Bajos. Todos los coffeeshops en los municipios que participan, son automáticamente parte del experimento. Esto es importante porque no es deseable para el experimento que haya diferencias de mercado dentro de un municipio. Los coffeeshops en estos municipios solo pueden vender cánnabis producido legalmente. En los coffeeshops fronterizos (también los incluidos en el experimento) la venta solo esta permitida a residentes registrados.
El cultivador
Los productores que quieran cultivar cánnabis para el experimento pueden solicitar un permiso. Hay un máximo de 10 permisos. Los productores no tienen que estar establecidos en uno de los municipios participantes y son responsables de la calidad del cultivo.
La oferta
Los productores consultan con los coffeeshops sobre los tipos de cánnabis que van a cultivar. El gobierno no exige el contenido de THC y CBD de los productos y los precios se dejan a los productores y coffeeshops.
Investigación
Durante el experimento, un equipo de investigadores independientes registra los desarrollos y los efectos de la cadena cerrada. Los municipios participantes, la Inspección de Justicia y Seguridad y la Autoridad Neerlandesa de Seguridad de Alimentos y Productos para el Consumidor, verificarán si se cumplan las normas.
Con partes traducidos de una publicación del gobierno neerlandés; el Ministerio de Justicia y Seguridad (JenV) y el Ministerio de Salud, Bienestar y Deporte (VWS). Foto: Get Budding
