LA HAYA – Fue toda una sorpresa por parte de la nueva coalición, ya que presentaron a un candidato bastante desconocido para ser primer ministro: Dick Schoof. Este alto funcionario de 67 años, con una larga carrera en justicia y seguridad, ha sido propuesto por los cuatro partidos de la coalición derechista. Schoof, que no tiene ninguna afiliación política y nunca antes había estado en el parlamento o el gobierno, liderará un gabinete «extraparlamentario», en el que los expertos y los nombramientos políticos están representados en igual medida.
En el sistema política neerlandés el pueblo no elige el primer ministro directamente, pero normalmente el ganador de las elecciones obtiene el puesto. En este caso se presenta al público alguien por quien nadie ha votado, pero es el resultado de un compromiso entre los cuatro partidos de coalición.
Una elección inesperada
Durante una conferencia de prensa el pasado martes, Schoof expresó su sorpresa por su nombramiento. «No estoy afiliado a ningún partido y no estoy aquí en nombre del PVV», subrayó. «Quiero ser el primer ministro de todos los neerlandeses». Su nombramiento se produce cinco meses después de la sorprendente victoria electoral del PVV de Geert Wilders, que obtuvo el 26% de los votos, pero no fue suficiente para gobernar en solitario.
Antecedentes políticos y experiencia
Dick Schoof no es un desconocido en el mundo administrativo. Comenzó su carrera en 1988 y desde entonces ha ocupado varios puestos clave, incluyendo coordinador nacional antiterrorista y director de la AIVD, el servicio de inteligencia de los Países Bajos. Aunque no tiene experiencia política, su amplio conocimiento en justicia y seguridad se considera una valiosa ventaja en el clima político actual.
Coalición y planes de políticas
La nueva coalición, compuesta por el PVV, VVD, BBB y NSC, tiene planes ambiciosos. Quieren implementar políticas más estrictas en cuanto a asilo e inmigración, aumentar la producción de gas natural y relajar varias regulaciones ambientales. Un componente importante de sus planes es la intensificación de los controles fronterizos y la aceleración de la deportación de personas que no obtienen asilo en otro país de la UE. También se aumentarán las velocidades permitidas en las autopistas donde sea posible y se reintroducirá el «diésel rojo» subvencionado para los agricultores a partir de 2027.
Miradas críticas y desafíos futuros
La candidatura de Schoof fue recibida con reacciones mixtas. Aunque los socios de la coalición están entusiasmados, existe cierta preocupación por su participación anterior en investigaciones controvertidas sobre la comunidad islámica durante su tiempo como jefe de la NCTV. Stephan van Baarle, del partido DENK, expresó su preocupación por las operaciones encubiertas en las juntas de mezquitas bajo la supervisión de Schoof. También la organización Contacto Islámico y Gobierno (CMO) tiene preguntas sobre su implicación en estas operaciones y advierte sobre posibles consecuencias negativas para la comunidad musulmana.
El camino hacia el nombramiento
Antes de que Schoof pueda asumir su nuevo rol como primer ministro, aún debe superar varios obstáculos. En las próximas semanas, trabajará junto con el informador Richard van Zwol en la formación del nuevo gabinete. Este proceso incluye la distribución de carteras, la evaluación de candidatos a ministros y secretarios de estado, y la realización de audiencias con el Parlamento.
Un primer ministro para todos
Schoof ha enfatizado repetidamente que quiere ser un primer ministro para todos los neerlandeses, a pesar de su anterior afiliación al PvdA y las preferencias políticas del PVV. «Una parte de los neerlandeses está preocupada por si este gabinete es para todos los neerlandeses», reconoció. Su estatus apartidista se considera una ventaja en un gabinete extraparlamentario, donde puede funcionar como un factor de unión y conexión entre los partidos.
Una nueva era
El nombramiento de Dick Schoof marca una nueva era en la política neerlandesa y para el gobierno neerlandés, con un primer ministro enfocado en la conexión y el gobierno pragmático. El tiempo dirá si su liderazgo logrará abordar las diversas preocupaciones de todos los neerlandeses. Con su amplia experiencia y posición neutral, la esperanza es que Schoof tiene el potencial de restaurar la confianza en la política.
